Hoy no quiero empezar hablando de logros, ni de metas, ni de todo lo que “deberíamos” haber hecho. Hoy quiero empezar agradeciendo.
Agradecerte a ti, que estás aquí leyendo estas palabras. Agradecerte por tu tiempo, por tu presencia, por tu curiosidad y por permitirte sentir. Gracias por acompañarme durante este 2025 en este espacio que hemos ido construyendo juntos, paso a paso, aroma a aroma, reflexión a reflexión: Encuentra tu Esencia Natural.
Este año no fue solo un calendario que se llenó de días. Fue un camino. Un proceso. Un movimiento interno que, aunque a veces silencioso, fue profundamente transformador.
🌱 Un año vivido, no perfecto
2025 nos trajo momentos de luz, de claridad y de expansión. Pero también nos trajo pausas inesperadas, dudas, cansancio y preguntas incómodas.
Y hoy, al cerrar el año, quiero decir algo importante: todo fue necesario.
Vivimos en una cultura que celebra solo lo bonito, lo productivo, lo exitoso. Pero el crecimiento real casi nunca es lineal. Crecer muchas veces implica detenerse, incomodarse, soltar versiones antiguas de uno mismo. Incluso aquello que llamamos “malo”, visto con el paso del tiempo, suele revelarse como un maestro. No llegó para castigarnos, sino para mostrarnos algo que necesitábamos aprender.
Por eso hoy agradezco todo: lo fácil y lo difícil, lo que entendí enseguida y lo que todavía estoy integrando.
🌿 Los aceites esenciales como aliados del alma
A lo largo de este año, los aceites esenciales no fueron solo protagonistas de contenido. Fueron compañeros de viaje. Nos recordaron que la naturaleza tiene una sabiduría silenciosa que siempre está disponible para nosotros. Que un aroma puede sostenernos cuando las palabras no alcanzan. Que el cuerpo, la emoción y la mente están profundamente conectados.
La lavanda nos enseñó a bajar el ritmo y a descansar sin culpa. El incienso nos invitó a mirar hacia adentro y a crear espacios de silencio. Los cítricos nos devolvieron la alegría, la ligereza y la confianza. La menta nos ayudó a despejar la mente cuando todo parecía confuso.
Cada aceite fue una invitación a escucharnos mejor. A respetar nuestros tiempos. A cuidarnos de una forma más consciente y amorosa.
🎄 Navidad: una pausa para integrar
Y llegamos a esta época tan especial del año: la Navidad. Más allá de luces, encuentros y celebraciones, la Navidad tiene algo profundamente simbólico. Nos invita a volver al origen. A reunirnos. A mirar hacia adentro.
Es un momento ideal para detenernos y preguntarnos:
- ¿Quién soy hoy, después de todo lo vivido este año?
- ¿Qué aprendí de mí?
- ¿Qué partes crecieron, incluso en medio de la dificultad?
Navidad también es gratitud. Por lo que fue. Por lo que es. Por lo que vendrá.
Que esta Navidad sea una pausa consciente. Un momento para honrar el camino recorrido, agradecer lo vivido y permitirnos integrar todo lo que este año nos dejó.
No para exigirnos más, sino para abrazarnos mejor. Seguimos… 🌿




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